Pues sí, Sara Hernando es alumni de la primera edición del Máster de Formación Permanente en Comunicación de Moda y Belleza UC3M-VOGUE. Y del máster a Redactora Jefe de Moda de la revista de sus sueños, Vogue, donde hizo prácticas hace ya casi veinte años. Sara cuenta con una dilatada carrera dentro del periodismo de moda y, en particular, en Vogue España, donde desde hace cuatro años es la responsable del contenido escrito de moda de la edición impresa de la revista. Y tras estos diecisiete años de trayectoria profesional, ha querido recordar con nosotros cómo fue su experiencia en el máster que le cambió la vida.
¿Cómo descubriste tu pasión por el periodismo de moda y por qué decidiste hacer el Máster VOGUE en Comunicación de Moda y Belleza?
Fue mientras estudiaba Periodismo. Desde siempre me ha gustado la moda y quería desarrollar mi carrera profesional en este ámbito. Sin embargo, en España en ese momento todavía no había formación específica en periodismo de moda. Al terminar la carrera no sabía muy bien qué hacer, así que me fui a vivir a Inglaterra. Justo cuando volví era verano, estaba leyendo el número de agosto de Vogue y vi que había un nuevo máster especializado en comunicación de moda, y dije “¡Esta es la mía!”. Así que apliqué y fue una decisión que, literalmente, me cambió la vida.
¿Cómo fue la experiencia durante el Máster y qué aspectos son los que más destacarías?
Me abrió las puertas a un mundo con el que soñaba, pero que desconocía. Porque una cosa es que te guste la moda, que la sigas, que leas sobre moda, que veas los desfiles… Y otra muy distinta es que te descubran cómo es la industria por dentro. Al ser la primera edición era diferente a como es ahora, éramos menos alumnos y las clases se impartían en la Universidad Carlos III de Madrid. Aún así, tuve la oportunidad de conocer a un gran número de profesionales, tanto de Condé Nast y de la propia revista Vogue, como gente que trabajaba en diferentes empresas, en firmas, fotógrafos, estilistas… Eso me hizo ver que había un montón de posibilidades laborales y que la industria de la moda, que era a lo que quería dedicarme, estaba realmente muy profesionalizada. Gracias al Máster descubrí que este tipo de periodismo era un trabajo real y me sirvió para reforzar mi decisión de apostar por ello.
¿Hay alguna asignatura que te marcase más o que destaques?
Había varias, pero una asignatura que me fascinó fue la de tejidos. La profesora era, y sigue siendo, Lucina Llorente, responsable de tejidos del Museo del Traje. Me encantó descubrir todas las variedades de tejidos y textiles que existen, conocer sus particularidades, qué diferencias hay entre cada uno... También me alucinó la asignatura de Historia del Periodismo de Moda impartida por Eugenia de la Torriente, que en ese momento era la Redactora Jefe de El País Semanal (y que actualmente es directora adjunta del diario El País, después de haber sido directora de Vogue). Fue fascinante. Diría que estas dos son las clases que más me marcaron.
¿Cómo te ha ayudado el Máster durante tu trayectoria como periodista de moda y qué puertas te ha abierto?
Sin duda, me abrió las puertas de una industria a la que es complicado, y en aquella época mucho más, entrar a trabajar si no estás ya en el circuito o si no conoces a nadie. Te tienen que abrir las puertas y, en mi caso, fue la de Vogue España. Al principio estuve cuatro años. Primero hice las prácticas y, al terminar, tuve la suerte de que les gusté y me contrataron. Luego trabajé una década en Harper’s Bazaar España y, finalmente, volví a Vogue España hasta hoy. Tras más de quince años en la profesión puedo decir que hacer el Máster fue el trampolín para trabajar en lo que más me gusta. Cuando empecé yo no conocía absolutamente a nadie y me dio la posibilidad de conocer, no solo a los profesores, sino también a todos los alumnos de aquella promoción que, a día de hoy, muchos de ellos también trabajan en la industria y son compañeros de profesión.
¿Qué ha significado para ti formar parte de la primera generación del Máster VOGUE en Comunicación de Moda y Belleza?
Fue maravilloso. Aquel año hicimos una piña y, después de tanto tiempo, tengo amigos actuales que formaron parte de aquella generación. Es cierto que, en ese momento, se demandaba muchísima gente para trabajar tanto en marcas, como en revistas y otro tipo de medios de comunicación, y no había la suficiente formada en comunicación de moda. Cuando terminamos el Máster, casi todos tuvimos la posibilidad de trabajar en la industria, así que fue genial formar parte de aquella primera generación, la verdad. Lo recuerdo con mucho cariño.
Por último, ¿qué consejo darías a los futuros estudiantes del Máster y de Condé Nast College Spain?
A los futuros estudiantes del Máster, a los futuros estudiantes de Condé Nast College y a todo el mundo que quiera trabajar en la industria de la moda les digo que, primero, trabajen súper duro por sus sueños, por lo que quieren hacer y por lo que quieren conseguir. Y después, que no pierdan la esperanza. Aunque parezca algo complicado, siempre hay una puerta que se puede abrir para ellos. Con tesón, mucho esfuerzo, muchas ganas y trabajando duro, sobre todo, seguro que hay un montón de oportunidades. Sea en una revista, una marca, una agencia de comunicación... Ahora mismo se puede trabajar en muchos sitios vinculados a la industria de la moda. Por lo que, si verdaderamente es su sueño, que lo aprovechen y que vayan a por ello.
